Por simple lógica o experiencia en la vida cotidiana, todas las personas saben que la carne fresca es un alimento que va a perecer rápidamente. En ese orden de ideas, una de las estrategias que todos implementamos consiste en tener las carnes congeladas para alargar su vida útil, lo que también repercute en que se mantengan sus nutrientes y su calidad. Por supuesto lo anterior también aplica para otro tipo de alimentos que se consumen en la vida cotidiana.
En comparativa, esta es una de las ventajas que tienen los batidos de Herbalife, pues no necesariamente se debe optar por esta clase de estrategias para que se mantengan en una buena condición. Retornando al tema de la conservación de la carne, no sólo se trata de la congelación, sino de otro tipo de medidas para que se pueda seguir disfrutando de la más alta calidad de una pieza de carne por un período de tiempo más largo.
El motivo central por el que se logran este tipo de resultados, tiene que ver con que la congelación para conservar los alimentos por períodos de tiempo prolongados, previniendo así el crecimiento de microorganismos patógenos, los cuales por sus características van a provocar un deterioro del producto como tal o enfermedades de distinta índole. De esta manera, cuando los alimentos se congelan es viable que aguanten mucho más tiempo sin que se estropean.
¿Cuánto tiempo puede aguantar la carne congelada?
Son muchos los factores y variables que se deben poner en consideración para responder una pregunta con estas características. Con relación a la duración de los alimentos en el congelador, todo resulta ser muy variable y también el tipo de alimento incluye en los resultados que se obtienen. Para dar un ejemplo, las carnes congeladas por lo general duran menos tiempo que las verduras.
Una de las razones principales para explicar lo anterior, es que los tiempos de congelación son distintos de acuerdo con la cantidad de grasa que hace parte de la composición de cada tipo de carne. Para ser más claros, los ejemplos son un método útil, y a continuación presentamos una serie de estimaciones respecto a la duración que pueden tener las carnes congeladas.
- Una carne muy grasa y los embutidos pueden llegar a aguantar en el congelador entre 1 a 2 meses.
- Las hamburguesas, entre otro tipo de preparaciones con carne picada fresca, pueden durar hasta 3 o 4 meses.
- Cuando se habla de chuletas de ternas y carne fresca de cerdo y cordero, se pueden congelar por períodos de entre 4 a 12 meses.
- El pollo, el pavo y otras carnes de ave llegan a soportar entre 9 a 12 meses.
Lo que se busca con este tipo de método es que las bajas temperaturas consiguen detener el crecimiento de las bacterias, pero no las reacciones de oxidación. En otras palabras, lo anterior va a ocurrir de una manera más lenta, pues la grasa va a continuar con el proceso de enranciado de una u otra manera.
Con relación a la persistencia de este proceso mediante el cual el alimento se va convirtiendo paulatinamente en rancio, es donde se encuentra una explicación de la causa de la pérdida de valor nutricional de las carnes. Igualmente, el sabor también se ve afectado, sin olvidar su color y textura. Es viable que no se note a simple vista durante los primeros momentos, pero siempre se debe poner en consideración que esto sucederá en algún punto.
Trucos para mantener la calidad de la carne congelada
Considerando que uno de los objetivos principales de muchas personas en la cocina es lograr evitar que la calidad de una carne congelada se afecte y parte de su valor nutricional se pierda, una de las anotaciones de los expertos en este asunto, es que se cumpla con distintos trucos pequeños que van a maximizar de una manera considerable su buen estado.
- Hay que verificar la temperatura del congelador para que sea la adecuada. Con este pequeño cambio se va a facilitar que la carne se pueda congelar en un período de tiempo menor.
- El congelamiento de los alimentos al vacío es fundamental. En términos ideales, se tienen que envolver en film o en recipientes adecuados. En caso contrario, siempre se va a correr un riesgo que vayan absorbiendo malos olores, pierden agua, se quemen o se resequen.
- Es importante que se separe la grasa visible las piezas. Tal y como se ha mencionado en los párrafos anteriores, el congelamiento no es capaz de detener el enranciado de las grasas y esto puede estropear la carne.
- Congelar la carne en porciones pequeñas o paquetes. En el momento en que se congelan piezas que son demasiado grandes, la parte central del producto va a necesitar de más tiempo para congelarse, por lo cual va a perder su calidad. Así mismo, es probable que se formen cristales de hielo en el producto, por lo cual al descongelar se van a ir rompiendo sus estructuras y sus características se estropearan.
- Haga lo posible por congelar la carne cocinada o sus guisos con carne en recipientes de plástico o cristal hermético. Espere a que se encuentren totalmente fríos antes de meterlos en el congelador.
Si se quiere que el congelador no se transforme en una especie de cajón de sastre, es fundamental que marque muy bien su contenido, al igual que las fechas descongelado de cada uno de los paquetes. De igual manera, haga lo posible para que se mantenga un orden fácil de comprender respecto al almacenamiento. Con estas sencillas decisiones se va a evitar tener que es parte de la carne porque quedó escondida y no estará en las mejores condiciones para su utilización.
¿Cómo descongelar de forma correcta?
Por supuesto que es importante prestar mucha atención a las condiciones en las que se congelan la carne, pero también hay que prestar atención a la descongelación. No servirá de nada que se conserven la carne, si al descongelar todo se echa a perder.
En realidad, la carne congelada se tiene que descongelar en frío, por ende, no es una muy buena idea que usted las deje a temperatura ambiente, ni que tampoco las acerque a una fuente de calor para que el proceso se acelere. Lo cierto es que la mejor manera para descongelar es que las deje en el frigorífico durante 24 horas. En los casos en que no se pueda planificar con antelación, use una función especial que tiene el microondas para descongelar.
Ahora bien, una vez se descongele, la carne tiene que ser cocinado de manera inmediata. Si se acerca a temperaturas cercanas a los 4 o 6 grados, las bacterias van a poder estar presentes antes del congelador y se van a empezar a multiplicar. Si una vez se cocina usted no la consume, la puede congelar de nuevo, pero nunca vuelva a congelar un alimento crudo.
Finalmente, si se quiere disfrutar de una carne congelada de alta calidad, lo más apropiado es que cumple carne fresca y que sea usted la persona que la congele.
